miércoles, 17 de febrero de 2010

INTERVENCIÓN DE MARIANOP RAJOY EN EL DEBATE ECONÓMICO

Muchas gracias, señor Presidente. Señorías:
No sé si el señor Rodríguez Zapatero nos ha entendido mal con motivo de
esta convocatoria, pero no le hemos hecho venir para que nos consuele, ni
para ofrecerle la oportunidad de que exponga sus excusas, sino para que
nos explique de viva voz qué es lo que está pasando.
Le hemos hecho venir porque atravesamos una situación de progresivo y
alarmante deterioro. Lo que se ve y lo que se oye transmite una penosa
sensación de falta de rumbo, de improvisación, de desgobierno. Nos
hemos convertido en la comidilla de nuestros socios europeos.
Esta situación le inquieta a todo el mundo. A ustedes, sin duda, también
puesto que han llegado a hablar de conjuras internacionales.
¿Qué está pasando, señoría?
Veníamos a escuchar sus explicaciones. En lugar de hacerlo nos descarga
la habitual letanía de autosatisfacciones y buenos augurios.
En esto he de reconocer, señor Rodríguez Zapatero, que es usted
coherente.
Una vez tras otra ha venido a decirnos que la recuperación es inminente.
Eso, después de negar la crisis por razones electorales, culpar a otros
de la misma, afirmar que sería pasajera y anunciar brotes verdes a cada
vuelta del camino.
Hoy nos anuncia, una vez más, y ya hemos perdido la cuenta, que estamos
a punto de superar la crisis. Y, una vez más, insiste en que, esta vez sí, la
recuperación económica se producirá este año; y que, esta vez sí que sí,
tenemos la creación de empleo al alcance de la vista, casi al alcance de la
mano.
Es decir, señoría, lo de siempre.
A veces pienso, señoría, que no estamos hablando del mismo país.
¿Estoy mal informado o tenemos medio millón de parados más que hace
seis meses?
¿Y hemos sobrepasado los cuatro millones de parados que no íbamos a
alcanzar?
¿Y hemos superado una tasa de paro juvenil del 44%?
¿Y es cierto que ha comunicado usted a Bruselas que en este año 2010 se
destruirán 360.000 empleos más?
Si todo esto es cierto, ¿de qué estamos hablando, señorías?
¿Y cuál es esa protección social que tanto satisface al señor Rodríguez
Zapatero?
¿Se refiere, tal vez, al millón largo de parados que no tienen cobertura?
¿A los 400 autónomos que se van al paro cada día?
¿Al millón de familias con todos sus miembros en el paro?
¿De qué presume?
¿Cuáles son sus éxitos en política social?
Porque vamos a ver, señoría, no quisiera equivocarme:
¿Es cierto que el Estado está gastando un 70% más de lo que ingresa?
¿Y que el Déficit público alcanza ya el 11,4 % del PIB?
¿Digo bien si digo que la Deuda ha pasado del 36% del PIB al 55% en dos
años?
¿Y que las pequeñas y medianas empresas y que los trabajadores
autónomos están ahogados por los impagos y la falta de crédito?
Si todo esto es cierto, ¿qué es lo que va bien?
Si todo está tan bien encarrilado, ¿por qué se acuerdan tanto de España
en la Unión Europea? ¿Por qué les preocupa a ellos una situación que
usted considera que mejora de día en día?
¿Tendrá algo que ver con ese déficit gigantesco que ha creado usted en
dos años? ¿Tendrá alguna relación con esa deuda oceánica que nos ha
cargado en la espalda a nosotros, a nuestros hijos y aún a los hijos de
nuestros hijos?
¿No se da cuenta, señoría, de que ya no inspira confianza ni dentro
ni fuera de España, ni a los consumidores ni a los inversores, ni a los
ciudadanos en general?
Eso es lo más grave que nos está pasando en este momento.
Esto, la pérdida de confianza en su forma de actuar, es lo más grave que
nos está pasando en este momento.
No inspira confianza, en primer lugar, porque no dice la verdad. Y no lo
hace porque esté ciego o porque vea las cosas de otra manera. No. No
inspira confianza porque niega la realidad con afán de engañar.
Ahora dice que estamos a punto de abandonar la crisis. ¿De dónde lo
saca? Porque, dejando aparte previsiones de otras instituciones, es su
Gobierno el que acaba de decir a Europa que la Economía española se
contraerá también este año. ¿O es que no lo dice?
Y no inspira confianza porque no hace nada de lo que debe hacer.
No inspira confianza porque no ha tomado las medidas adecuadas que le
han aconsejado todas las instituciones nacionales e internacionales a las
que ha menospreciado. Usted sólo hace anuncios. Ha venido en un sinfín
de ocasiones a esta Cámara a presentar planes y más planes, anuncios
y más anuncios. Y cada vez que viene las cosas están peor. ¿Para qué
valen sus planes y para qué valen sus anuncios?
Para colmo, señor Rodríguez Zapatero, sus últimas actuaciones, sus
palabras y sus promesas, no se corresponden con los hechos.
Si los parados, especialmente los parados, necesitan una reforma laboral
en serio, y usted se limita a dar un guión informativo y delegar su
responsabilidad en sindicatos y patronales, que llevan dos años en esa
tarea, está usted rehuyendo sus responsabilidades. Eso sí, con mucha
trompetería dialéctica, muchas fotos y muchas ruedas de prensa en
Moncloa.
Anuncia en Bruselas, 28 días después de aprobar los Presupuestos
Generales del Estado, donde aumenta el gasto en 27.000 millones,
anuncia una reducción del gasto público de 50.000 millones de Euros en
cuatro años, pero de ellos sólo 5.000 este ejercicio. Señoría, su voluntad
de reducir el gasto público es poco creíble. Y le diré por qué. Fíjese, de
5.000 millones de euros de recorte anunciado para 2010, solamente 250
millones de euros son disminución del gasto corriente. El resto, el 95%,
lo quita usted de inversiones productivas, apoyo a las empresas y trucos
contables como los 1.500 millones del fondo de contingencia. Y dice usted
que en los próximos, no en éste, va a bajar el capítulo de personal un 4%.
Así ha evolucionado el capítulo de personal desde que usted es presidente
del Gobierno: ha subido el 41%.
Me temo que estamos ante un nuevo anuncio, una fórmula para salir del
paso; una más de esas a las que ya nos tiene habituados.
¿Cómo puede inspirar confianza un gobierno que remite un plan por la
mañana y lo rectifica por la tarde, que propone un nuevo sistema para
calcular la pensión de jubilación y luego dice que no lo ha hecho, que
utiliza un discurso distinto para cada interlocutor y dice una cosa aquí, otra
en Londres, y otra a los sindicatos, procurando quedar bien con todo el
mundo?
Esto no sale gratis. La realidad no perdona el engaño, y dar pie a la
desconfianza es el peor perjuicio que se está causando hoy a la economía
española.
No busque culpables más allá de su escaño porque todo el mérito es suyo.
No es que ahora le miren en Europa con malos ojos, es que ahora le
conocen.
No busque conspiraciones ni chivos expiatorios. Averigüe qué ha hecho
usted para que su gobierno suscite tantos recelos.
Y no es España la que inspira desconfianza: es usted, es la forma que tiene
este Gobierno de llevar la economía.
España es un país fiable, porque es un país que cumple, España es una
nación seria; tanto que su vicepresidenta, la señora Salgado, ha presumido
en Londres de cómo los españoles supimos cumplir aquellos dificilísimos
criterios de Maastricht. Es verdad: lo hicimos. Se le ha olvidado decir a
la señora vicepresidenta que entonces gobernaba el PP, pero es verdad:
España es una nación seria y adulta que entiende los problemas y acepta
los sacrificios cuando está bien gobernada.
España es un país serio; el gobierno de su señoría, no.
Acaba de ofrecer en estos días una exhibición más de inconsecuencia.
Por un momento parecía que, acuciado por los mercados, le hubiera
acometido el arrepentimiento. Parecía dispuesto, aunque fuera de forma
tácita, a reconocer sus errores y a corregir el daño que ha causado a la
economía de los españoles.
De pronto se acuerda de que urge reducir el gasto público, le apremia la
reforma de las pensiones, y decide, con mano firme, abordar la siempre
denostada reforma laboral.
Parecía increíble, porque se estaba llevando la contraria a usted mismo,
de viva voz.
En efecto, era increíble. Un espejismo. Un gesto más. Amagar y no dar.
A los pocos días todo quedaba en palabras. Yo comprendo, señor
presidente, que gobernar es muy duro.
Corregir el déficit exigiría, ciertamente, reducir ya varias decenas de miles
de millones, cargarse los dispendiosos presupuestos que aprobó hace un
mes, cambiar la reciente reforma de la financiación autonómica que sólo
va a traer más endeudamiento y exponer un plan, probablemente poco
agradable, de recortes en el gasto. Comprendo que le tiemble la mano.
Y, por tanto, comprendo que, una vez que ha pasado el susto
internacional, decida no complicarse la vida. Lo puedo comprender, pero
no lo puedo admitir.
Ha sido un momento de pánico, pero ha tenido la virtud de obligarle a
reconocer lo que necesita España: reestructurar el gasto público, acabar
con el descontrol del déficit y de la deuda, acometer la reforma laboral.
A ello, hemos de añadir la rebaja de impuestos para los emprendedores,
la reestructuración del sistema financiero y las reformas de sectores
estratégicos.
En fin, vamos a lo que más importa en el debate de hoy.
¿Quién se ocupará de ofrecer a los españoles lo que usted no ha querido
darles?
¿Quien acometerá la reducción del gasto, la corrección del déficit y el
control de la deuda? Usted no ha querido hacerlo.
¿Quién va ocuparse de que vuelva a circular el crédito y recupere su
aliento la actividad económica? Usted no ha querido hacerlo.
¿Quién se atreverá a hacer la reforma laboral que despeje el horizonte de
cuatro millones cuatrocientos mil parados? Usted no ha querido hacerlo.
¿Quien va a decir la verdad a los españoles y dejar claro que sin sacrificios
no podemos recuperar el bienestar? Usted no ha querido hacerlo.
Y digo que “no ha querido” porque en ningún momento le ha faltado a usted
el apoyo de una mayoría en esta Cámara.
No ha habido ni una sola medida económica, incluida la más importante,
los Presupuestos Generales del Estado, que no haya podido salir adelante
por falta de apoyos, ninguna.
Todas las normas que usted ha propuesto, todas, se le han aprobado y en
la única ocasión que podían faltarle los apoyos habituales, en el caso del
sistema financiero, contó con la ayuda del Partido Popular.
Ha podido usted gobernar como ha querido. Es usted, por lo tanto, el único
responsable de la actual situación.
Bien, señorías, la gran pregunta que cabe hacerse es ¿qué se puede hacer
en estas circunstancias, en las que la tarea sigue abandonada porque el
responsable, que es usted, a pesar de su mayoría en esta Cámara, que la
ha tenido, no ha querido asumirla?
Usted ha venido a pedir ayuda, diálogos, acuerdos, incluso nos ha
anunciado que ha creado una comisión.
Bien, yo le recuerdo, que en esta misma cámara le he ofrecido, y ahí está
el diario de sesiones, no una vez sino seis, la posibilidad de ponernos de
acuerdo para combatir la crisis. Usted lo ha rechazado, no una vez sino
seis.
¿Qué ha alegado usted en la última ocasión, hace mes y medio?
Concretamente el 30 de diciembre, cuando se le preguntaba por la posible
reedición de Pactos de la Moncloa. Respondía, señor Rodríguez Zapatero,
una cosa asombrosa tratándose de crear empleos y corregir las cuentas:
alegó usted diferencias ideológicas, profundas diferencias ideológicas. ¿Y
eso qué significa? Que no quería pactos.
Ha aducido usted para no llegar a acuerdos en materia económica con el
PP que “nos separan diferencias ideológicas de fondo” en este terreno.
Yo creo, señoría, que lo que nos separa de verdad son las diferentes
actitudes ante la realidad. Por ejemplo, la pasada semana decía usted
en esta Cámara que la economía española no está peor que hace seis
meses.
Escuchen bien. Para el Presidente del Gobierno la situación económica no
ha empeorado en los últimos seis meses. En este tiempo se han destruido
300.000 empleos, se ha incrementado el paro en 504.000 personas, el
número de afiliaciones a la Seguridad Social ha descendido en 600.000,
la actividad económica ha seguido cayendo, el consumo sigue estancado,
la inversión continua descendiendo, el déficit del sector público sigue
aumentando y la deuda pública engordando.
Pues bien, señorías, hay que decir la verdad, hay que tener el valor de
reconocerlo y después de afrontarlo. Esa es la diferencia más importante
que tenemos usted y yo.
Como comprenderá que vistas sus contradicciones, sus cambios de
rumbo, sus errores de diagnóstico, sus continuas improvisaciones sus
cambiantes actitudes ante la crisis, su credibilidad en esta materia está
bajo mínimos.
Y esto más allá de los resultados en los que ya no voy a incidir.
Por lo tanto, entenderá señor Rodríguez Zapatero que, como condición
previa para liderar un proceso de acuerdos, antes tiene usted que
recuperar la credibilidad perdida. Porque en caso contrario, y para
continuar con las mismas extravagancias económicas, eso que llama usted
imperativos ideológicos, no le hace falta ningún pacto. Se basta y se sobra
usted con sus apoyos habituales.
Por lo tanto, si quiere darnos pruebas de que va en serio y de que se ha
terminado la etapa de los planes, los anuncios, y de los nuevos anuncios
y de los anuncios que se vuelvan a anunciar, tiene usted una ocasión
inmejorable ahora.
Anuncie, aquí y ahora, que quedan sin efecto las subidas de impuestos
que usted ha promovido para este año. Me refiero a los impuestos sobre el
ahorro y al Impuesto sobre el Valor Añadido.
Anuncie, aquí y ahora, que se pone en marcha de forma inmediata lo
acordado el otro día en esta Cámara, con el apoyo de su grupo
parlamentario, de no exigir el pago del IVA hasta que la factura este
cobrada.
Anuncie, aquí y ahora, que está dispuesto, ya este mismo año, a acometer
una más intensa reducción del gasto público de la que usted ha anunciado.
Comprométase a reducir durante este ejercicio en 10.000 millones de
euros el gasto de funcionamiento del Estado. Ha dicho usted que puede
hacerlo, hágalo y comprométase aquí. Empezando, señor presidente, por
la disminución en un 25% de altos cargos, aprobada por esta Cámara, por
mayor hace una semana.
Anuncie, aquí y ahora, que va a modificar de forma inmediata la Ley
General de Estabilidad Presupuestaria, que usted liquidó en la anterior
legislatura, para establecer techos de gasto y límites de endeudamiento a
todas las Administraciones Públicas y garantizar así el cumplimiento del
Programa de Austeridad. Vuelva a la estabilidad de Ley Presupuestaria
que usted derogó porque quiso.
Anuncie, aquí y ahora, que para aliviar el gravísimo problema de liquidez,
motivado por los impagados y la escasez de créditos que tienen los
autónomos y las pequeñas y medianas empresas, va a transformar la
totalidad del Fondo de Inversión Local de 5.000 millones de euros en una
línea de crédito para el pago de facturas pendientes a esos proveedores.
Anuncie aquí que se va a probar una ley verdadera ley contra la
morosidad, sin subterfugios, con un límite de 60 días para el pago de las
facturas, que no deje al simple pacto entre las partes el cumplimiento de
pago o el cumplimiento de la emisión de la factura. Anúncielo aquí.
Si hiciera esto, y se comprometiese aquí, delante de esta cámara, le hablo
de cosas que han aprobado esta misma Cámara empezaría usted a dar
algunas muestras de que se está tomado en serio las cosas. Y entonces
podemos hablar de todo lo demás.
Podemos hablar de la reforma del mercado laboral, para evitar que haya
más de un 30% de trabajadores temporales con indemnización cero, y,
por tanto, habrá que hacer otro nuevo modelo de contrato
Podemos hablar en serio de la reestructuración del sistema financiero. Es
que el FROP al que usted se ha referido aquí fue aprobado en junio y
estamos en febrero y no se ha hecho ninguna operación.
Podemos hablar de pensiones, claro que podemos hablar señor presidente
del Gobierno.
Podemos hablar de la competitividad, a través de más competencia y de la
unidad de mercado.
Y podemos hablar de la reforma educativa y la del sistema energético,
pero haber si usted se aclara, díganos si está de acuerdo –yo ya digo que
sí- con lo que dijo ayer el ministro de Industria, temer a la energía nuclear
es como temer a los eclipses de luna o de sol, yo estoy de acuerdo con
usted, pero al ver si el presidente del gobierno se clara, y también está de
acuerdo con usted.
Si hace todo eso, aquí nos tiene y si no lo hace, y si no rectifica, dada la
situación, tiene que permitir que otros lo hagan.
Esta es la cuestión, señorías: es preciso que las cosas cambien, en eso
está todo el mundo de acuerdo, pero quien lo impide es usted, que ni
cumple con su obligación ni permite que otros lo hagan.
Termino ya.
Tienen ustedes tres alternativas:
La primera que usted, señor Rodríguez Zapatero, rectifique a fondo y con
pruebas fehacientes, aquí y ahora, su política económica, porque así no
podemos seguir.
La segunda, como estoy convencido de que usted no va a ejercitar su
prerrogativa constitucional de disolver las cámaras, no la veo muy factible
aunque aquí hay una alternativa dispuesta a gobernar en esta Cámara. .
La tercera es que ustedes, que ganaron las elecciones, que tienen una
mayoría legítima en esta cámara, que con esa mayoría y con ningún
voto más, invistieron como presidente de gobierno al señor Rodríguez
Zapatero, reconsideren su posición.
Son ustedes los que tienen que decidir.
Ustedes verán lo que hacen, pero no duden de que si se empecinan en
mantenella, iremos de mal en peor.
Perderemos dos años más, por el puro capricho de retrasar lo inevitable.
El tiempo no traerá el remedio. El tiempo sólo ayuda a los que se ayudan.
España necesita ya un gobierno en el que se pueda confiar, y no lo tiene.
En España hay una tarea urgente que realizar, y nadie la realiza.
Necesitamos que las cosas cambien, no hay nadie que no lo diga, y
en manos de ustedes está el cambiarlas. Ya saben cuáles son sus
alternativas, muchas gracias.

lunes, 8 de febrero de 2010

DEPORTE ESCOLAR EN ALCOBENDAS

Uno de los principales objetivos del gobierno municipal de Alcobendas en materia deportiva es el desarrollo del deporte escolar. Gracias a la colaboración de los clubes y las AMPAS, en nuestra ciudad se ha impulsado la práctica del atletismo y la natación, y ahora acabamos de iniciar un nuevo proyecto, el “Escobasket”, para fomentar el baloncesto.

La propuesta del deporte escolar consiste en lograr que nuestros jóvenes incorporen la práctica deportiva a su modo de vida, como un valor capaz de aportar a su desarrollo personal múltiples y saludables beneficios. La finalidad es completar el desarrollo educativo de cada deportista a la vez que satisfacer sus necesidades individuales.


Los principios que inspiran el programa de deporte escolar son formativos, educativos y lúdicos, por lo que deportistas, profesores, entrenadores, asociaciones de padres, colectivos arbitrales, etc., deben dar un tratamiento especial a estas actividades, procurando entre todos trasladar los principios del juego limpio, el compañerismo y las prácticas de vida saludables, el rechazo a la violencia y favorecer la integración de todos los componentes de un equipo sin discriminación de ningún tipo.

En definitiva, lo que pretendemos en Alcobendas es contribuir a una mejor formación integral de la persona, enseñando a los estudiantes el valor de la cooperación y el trabajo en equipo, ayudar a un desarrollo físico más sano y armonioso así como a emplear el tiempo de ocio de forma divertida.

sábado, 6 de febrero de 2010

La encrucijada de Rajoy: el difícil equilibrio entre patriotismo y oportunidad

A lo largo de estos ya casi treinta y cinco años de libertad nuestro país no ha vivido una situación semejante a la actual, en la que confluyen una crisis económica muy profunda, una crisis institucional sin precedentes, una crisis territorial grave y una crisis política de mucho calado en la medida en que el Gobierno se muestra incapaz de ofrecer el más mínimo resquicio a la esperanza y, al contrario, aparece como en estado de shock absolutamente superado por los acontecimientos. Una sola semana ha bastado para poner de manifiesto el alcance de esta situación y hasta qué extremo su gravedad afecta no solo dentro de nuestras fronteras sino, también, más allá de ellas, así como la medida en que el Gobierno se muestra desnortado y desconcertado, incapaz de reaccionar. Ni siquiera cabe recurrir a la nota de humor de la presencia de Rodríguez en el Desayuno de la Oración, porque la realidad es tan dolorosamente grave que la hilaridad se puede incluso volver en contra, pero su imagen y su discurso al otro lado del Atlántico son un fiel reflejo de hasta qué punto el presidente vive muy lejos, extremadamente lejos, de esa realidad.

Lo que hemos vivido en estos siete días no tiene precedentes, y ni siquiera la confirmación de los peores augurios de quienes desde hace tiempo venimos advirtiendo de esta deriva imparable puede servir de satisfacción: la cruda realidad es que el proyecto político de José Luis Rodríguez Zapatero se ha venido abajo como un castillo de naipes, llevándose por delante los elementos básicos para una convivencia en paz, libertad y progreso sobre los que se construyó la Transición. Lo ocurrido en unos pocos días, casi desde que España estrenara la Presidencia Europea, pero sobre todo desde la asistencia de Rodríguez al Foro de Davos, no es otra cosa que la recolección de la siembra de estos años atrás: inacción política, división forzada de los españoles y ruptura de los consensos constitucionales. España ha perdido por completo el crédito que tenía en el exterior, y esto que es algo sobre lo que unos pocos llamábamos la atención desde tiempo atrás, se ha manifestado con una crudeza casi cruel en las dos últimas semanas. Y para que un país pierda su crédito exterior, es necesario que en el interior todo vaya mal, muy mal, y que el Gobierno se muestre incapaz de reconducir la situación. Ese es, exactamente, el análisis limpio y frío que cabe hacer en este momento de la realidad de nuestro país, les guste o no a algunos que se empeñan en mantener viva la llama de la confianza en un presidente que ha cimentado toda su estrategia política en una farsa.

Todos pendientes de Rajoy

¿Qué hacemos ahora? Inevitablemente, los ojos de los ciudadanos se vuelven hacia el líder del principal partido de la oposición, el único que en una democracia como la nuestra puede coger en sus manos el testigo de la alternativa. Da igual lo que digan las encuestas sobre su popularidad, puesto que en una situación así las respuestas de los encuestados se radicalizan mucho y mientras los votantes de centro-derecha mantienen una actitud más moderada, los de centro-izquierda abusan de su animadversión hacia el líder que saben que puede arrebatarles el poder. Lo cierto es que todo el mundo, en este momento, está pendiente de Rajoy y son ya pocos en el país los que todavía no creen que vaya a ser el próximo presidente del Gobierno de España. Pero, hasta que eso ocurra, se va a mirar con lupa todos y cada uno de los movimientos que lleve a cabo el líder del PP, cuya responsabilidad es, en estos momentos, si cabe mayor incluso que la que puede tener Rodríguez Zapatero, en la medida en que éste último se ha demostrado incapaz de dar respuestas a los problemas del país, que son muchos y muy graves. Consciente de su papel, el líder del PP está obligado a guardar un escrupuloso equilibrio entre el sentido de Estado que debe llevarle a evitar cualquier movimiento que pueda agravar, aunque solo sea un poco más, la actual situación, y el deber con su partido y con sus votantes de no perder la oportunidad de volver al poder para llevar a cabo su proyecto político.

Viéndose con la soga al cuello, es más que probable que Rodríguez intente, por todos los medios a su alcance, no caer en el abismo sujetándose in extremis de un pacto con el Partido Popular. Pero ese pacto, necesario para poner en orden todo lo que Rodríguez ha torcido durante estos años, solo es posible llevarlo a cabo previa consulta de los ciudadanos en las urnas, y esa y solo esa puede ser la respuesta del PP a una oferta tramposa que llegará de la mano de quien comenzó a gobernar asentando su estrategia en el Pacto del Tinell y la política del cordón sanitario, es decir, buscando en todo momento la exclusión, cuando no el aniquilamiento, del centro-derecha. Rajoy esta obligado, por tanto, a actuar con un componente extra de serenidad para evitar sucumbir a la tentación de echarse al monte, sugerida por el ala más a la derecha de su partido y el entorno mediático que la sustenta, y tampoco dejarse seducir por los cantos de sirena de quienes, desde la izquierda supuestamente moderada, le van a reclamar que arrime el hombro junto al Gobierno por el bien del país al tiempo que le adulan como próximo presidente del Ejecutivo. En ambos casos la trampa tiene un único ganador, Rodríguez Zapatero, y sólo desde una exquisita claridad de ideas y una templada firmeza podrá el líder del PP evitar que la balanza se incline a un lado o al otro. La salida de la crisis, de la profunda crisis política, económica e institucional que atraviesa nuestro país, solo tiene una dirección: elecciones generales, y cuanto antes, mejor.
Federico Quevedo. El Confidencial.

miércoles, 3 de febrero de 2010

ECONOMÍA EN DOS TARDES EN ALCOBENDAS

RECONOZCO QUE PARA PREPARAR ESTE ARTÍCULO HE TIRADO DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN. PORQUE DEJADME QUE OS CUENTE:
EL 3 DE JULIO DE 2007 DECÍA ZAPATERO: “LA PRÓXIMA LEGISLATURA LOGRAREMOS EL PLENO EMPLEO EN ESPAÑA”
POR SI ESTO NO SONABA YA FUERTE, SU ENTONCES MINISTRO, SOLBES, AÑADIA EN AGOSTO 2007, TAL VEZ CON UN ATAQUE DE CALOR: “LOS EFECTOS DE LA CRISIS HIPOTECARIA TENDRÁN UN IMPACTO RELATIVAMENTE PEQUEÑO EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA”.
EN ALCOBENDAS, POR ESAS FECHAS, NOSOTROS ELIMINÁBAMOS LA TASA DE BASURAS A NUESTROS VECINOS Y A CASI 800 PEQUEÑOS COMERCIOS. LO PROMETIMOS Y LO CUMPLIMOS.
EL 14 DE ENERO DE 2008, ZAPATERO DIJO: “LA CRISIS ES UNA FALACIA, PURO CATASTROFISMO. VAMOS A SEGUIR CREANDO EMPLEO Y TENIENDO SUPERÁVIT”.
EN 2008, EN ALCOBENDAS, NOSOTROS CONGELAMOS EL IAE Y EL IMPUESTO DE VEHÍCULOS... E IMPLANTAMOS LA AUSTERIDAD Y EL CONTROL DEL GASTO PÚBLICO.

NOS ADELANTÁBAMOS A LA CRISIS Y, PESE A ELLA, PRESENTAMOS UNO DE LOS PRESUPUESTOS MÁS SOCIALES Y MÁS AMBICIOSOS DE LA HISTORIA DE ALCOBENDAS.

EN FEBRERO DE 2008, SOLBES DIJO: “LOS QUE AUGURAN EL RIESGO DE RECESIÓN NO SABEN NADA DE ECONOMÍA. LA ECONOMÍA ESPAÑOLA CRECERÁ LA PRÓXIMA LEGISLATURA PERMITIENDO CREAR 1,6 MILLONES DE NUEVOS EMPLEOS”. Y ZAPATERO AÑADÍA: “LAS CUENTAS PÚBLICAS HAN TENIDO SUPERÁVIT TODOS LOS AÑOS, 70.000 MILLONES DE SUPERÁVIT, QUE NOS PERMITEN TENER UNA GARANTÍA Y UNA FORTALEZA PARA ATENDER CUALQUIER NECESIDAD”

EN ALCOBENDAS LOS SOCIALISTAS YA APLICABAN ESAS TEORÍAS ECONÓMICAS TAN CERTERAS DE ZAPATERO Y DEJARON, ANTES DE IRSE, UN AGUJERO ECONÓMICO DE 68 MILLONES DE EUROS. Y ESO QUE A ELLOS LES TOCÓ GOBERNAR EN ÉPOCA DE BONANZA ECONÓMICA. 68 MILLONES DE EUROS. SE DICE PRONTO. AL ESTILO ZP.

EN ABRIL DE 2008, ZAPATERO NOS SOLTÓ UNA PERLA: “LA ACTITUD DE QUIENES EXAGERAN SOBRE EL ALCANCE DE LA ACTUAL SITUACIÓN ECONÓMICA ES ANTIPATRIÓTICA, INACEPTABLE Y DEMAGÓGICA”.
EN ALCOBENDAS, NOSOTROS, ANTIPATRIOTAS, INACEPTABLES Y DEMAGÓGICOS, REBAJAMOS EL AGUJERO ECONÓMICO DEL PSOE DE 68 MILLONES DE EUROS A 48 MILLONES. NADA MENOS QUE 20 MILLONES DE EUROS EN POCO MENOS DE TRES AÑOS, Y BAJAMOS LOS IMPUESTOS DE 2009 Y EN 2010 NINGÚN VECINO PAGARÁ NI UN EURO MÁS EN IMPUESTOS MUNICIPALES.

EN ABRIL DE 2009, ZAPATERO DIJO: “ES PROBABLE QUE LO PEOR DE LA CRISIS ECONÓMICA HAYA PASADO YA”.
SEÑOR ZAPATERO:
- 18,8% DE TASA DE PARO, SEGÚN USTEDES. 19,5% SEGÚN EUROSTAT. MENOS MAL QUE YA PASÓ LO PEOR.
- 5 COMUNIDADES AUTÓNOMAS TIENEN UNA TASA DE PARO POR ENCIMA DEL 20%, ANDALUCÍA, CANARIAS, VALENCIA, EXTREMADURA Y MURCIA.
- EN EL ÚLTIMO TRIMESTRE DE 2009, UN 60% DE LOS EMPLEOS DESTRUIDOS SON DE MENORES DE 25 AÑOS. EL 40% DE LOS JÓVENES ESTÁN PARADOS Y EL 57% DE LOS QUE TRABAJAN LO HACEN TEMPORALMENTE. SON LA GENERACIÓN ZERO, ZERO OPORTUNIDADES, ZERO SALIDAS, ZERO ZAPATERO.
- 1.118.600 SON LAS PERSONAS QUE SE HAN QUEDADO EN PARO EN LOS ÚLTIMOS DOCE MESES. LA CIFRA TOTAL ES DE 4.320.000- MENOS MAL QUE LO PEOR YA PASÓ.
- 1.220.000 SON LOS HOGARES EN QUE TODOS SUS MIEMBROS ESTÁN PARADOS. ¿LO PEOR YA PASÓ? NO... LO PEOR NO HA PASADO SEÑOR ZAPATERO. LO PEOR PASARÁ CUANDO USTED SE MARCHE Y DEJE DE DISCRIMINAR A LA COMUNIDAD DE MADRID ¡¡Y A TODA ESPAÑA!!

Y MIENTRAS ESPAÑA SE DESGOBIERNA Y AHORA RESULTA QUE NOS JUBILAMOS DOS AÑOS MÁS TARDE NO VAYAMOS A QUEDARNOS SIN PENSIÓN... EN ALCOBENDAS EL PRODUCTO INTERIOR BRUTO EN 2010 TENDRÁ UN CRECIMIENTO DEL 0,8%, POR ENCIMA DE LA MEDIA DE LA UNIÓN EUROPEA QUE SERÁ DEL 0,4% Y POR ENCIMA DE LA PREVISIÓN EN ESPAÑA QUE SERÁ DE UN CRECIMIENTO NEGATIVO DE -0,6%.
Y AQUÍ LA TASA DE DESEMPLEO ESTÁ EN UN 8,68 % UNA DE LAS MÁS BAJAS DE LOS MUNICIPIOS DE LA COMUNIDAD DE MADRID.
ASÍ QUE, QUERIDO ALCALDE DE ALCOBENDAS, QUERIDO IGNACIO, HAS DEMOSTRADO QUE, A PESAR DE LA CRISIS Y LA INACCIÓN E INCAPACIDAD DEL GOBIERNO DE ZAPATERO, EL PP TIENE SOLUCIONES.
PERO TU YA TIENES UN PREMIO. TODOS NOSOTROS LO TENEMOS: LA CONFIANZA DE LOS CIUDADANOS DE ALCOBENDAS EN EL GOBIERNO DEL PARTIDO POPULAR .